La música de la nueva política europea para el periodo 2014-2020 es muy atractiva, tiene una melodía que encandila con conceptos como crecimiento inteligente, integración social, sostenibilidad, especialización inteligente… Sin embargo, a 30 días del inicio del periodo los músicos que deben tocar estas partituras (léase estados miembros) andan enredados en la selección de instrumentos, en acordar un ritmo en el que todos se sientan a gusto, o ver quien liderará el estribillo pegadizo.

Desde QuinceGrados nos quedamos con varias partituras, y colaboramos con estos músicos para que esta melodía, cuando hay que tocarla en el ámbito local, se convierta en el álbum de la década.

Hoy nos centramos en una de ellas, una vieja conocida para muchos de las colaboradores que andamos en la red de QuinceGrados: LEADER, o como ahora se denomina en modo “extendido” Desarrollo a Cargo de las Comunidades Locales.

Revisando sus orígenes el acrónimo “LEADER” se deriva de las palabras francesas “Liaison Entre Actions de Développement de l’Économique Rurale”, que significa, “Enlaces entre la economía rural y las acciones de desarrollo”. La idea era contar con la energía y los recursos de las personas y entidades que puedan contribuir al proceso de desarrollo rural mediante la formación de alianzas a nivel sub-regional entre los sectores público, privado y civil. En 1990, cuando un grupo de funcionarios de la Comisión Europea presentó la propuesta de LEADER, este concepto de conectar con la gente era bastante nuevo. En términos prácticos, LEADER ofrece el diseño de estrategias de desarrollo y financiación a nivel local, lo que hace que sea una herramienta efectiva de descentralización. La unidad administrativa básica es un Grupo de Acción Local sin fines de lucro (LAG) abierto a todos los actores de un territorio determinado (LEADER Tool – Kit, European Network for Rural Development)

La Comisión Europea para este nuevo periodo entiende que su programación debe permitir la integración y coordinación de la inversión pública en el territorio, que no podemos seguir invirtiendo de manera descoordinada y que cada fondo europeo no aporte su grano de arena a la cohesión territorial. El MEC (Marco Estratégico Común) al menos es eso lo que persigue.

El método propuesto para su aplicación en el territorio es el LEADER, obligatorio para las inversiones vía el Fondo Europea Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) y voluntario en su aplicación para el Fondo Europea de Desarrollo Regional (FEDER), el Fondo Social Europea (FSE) o el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP).

LEADER en el ámbito rural o periurbano tiene un largo recorrido, con experiencias de gestión con enfoque de abajo-arriba exitosas que han permitido la generación de sentido pertenencia al territorio e invirtiendo el presupuesto europeo bajo estrategias de desarrollo local con un mix de participación de agentes sociales, económicos y públicos.

En este enlace puedes acceder a más información sobre “lo aprendido” en el periodo 2007-2013:

Sin embargo, LEADER y los Grupos de Acción Local (GAL) que lo pilotan en el territorio, tienen que hacer frente a nuevos retos, a superar rutinas de gestión y burocratización, recuperar parte del poder de esta iniciativa que ha pasado manos de gobiernos regionales, establecer redes de cooperación y captar nuevos recursos económicos.

El primer semestre de 2014 es clave para ordenar y establecer las reglas del juego para los próximos 7 años de cómo implementar el método LEADER a nivel nacional y autonómico. QuinceGrados esta colaborando con distintas entidades aportando su experiencia desde el territorio para que este nuevo periodo LEADER recupere algunos de sus valores perdidos.